El Día de la Raza y la Paz

Los pueblos indígenas en Colombia a través de toda la historia se han enfrentado a muchas luchas y desafíos. Cuentan con muy poca representación política en los espacios de poder, son rara vez consultados frente a las decisiones trascendentales del país, batallan contra la discriminación, han sido desplazados de sus tierras, y lo más grave: son víctimas directas del conflicto armado.

La plaza de Bolívar de Bogotá, frente al Capitolio Nacional, se convirtió en el encuentro de diferentes etnias que habitan sobre el territorio colombiano. Miles de indígenas, víctimas del conflicto armado interno, marcharon masivamente para exigir al Gobierno ser escuchados y que logre por fin un acuerdo de paz con las Farc, tras el rechazo expresado por la mitad del país en el plebiscito por la Paz.

Dentro de danzas ancestrales, vestimenta tradicional que identifica a cada etnia se escuchaban a su paso clamores de Paz. «¡Acuerdos ya!» y «¡Queremos paz!», fueron los gritos que más expresaron durante esta manifestación pública. Y es más que entendible, ellos vivieron de cerca la guerra en las selvas de nuestro país, perdieron familiares y fueron también reclutados. Los territorios indígenas han sido uno de los campos de guerra más importantes de este prolongado conflicto armado. Estas comunidades en tiempos anteriores ya habían solicitado al Gobierno y a la insurgencia de las FARC que resolvieran sus diferencias, ofreciéndoles sus comunidades como espacios abiertos para el diálogo.

También cabe resaltar que trajeron propuestas en defensa de la «Madre Tierra». Se definió realizar el Encuentro Nacional de los Pueblos Indígenas en defensa de la naturaleza. En realidad, los pueblos indígenas han estado diciendo «ya basta» durante muchos años, no solo a la guerra, sino también a los daños ecológicos de las explotaciones mineras que ocasionan tanta contaminación ambiental y de la cual ellos también son víctimas directas.

Este Día de la Raza nos deja no solo un mensaje de más atención a las comunidades indígenas, sino también la claridad de que ellos no han sido unos aliados de la guerrilla de las Farc como muchos en el país han creído, y que más bien son la más grande expresión anti-guerra y radical en Colombia.

@MLLacouture

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